CIRCULAR N°
2/96 de la Oficina Nacional de Presupuesto
BUENOS
AIRES, ABR 1996
PARA
CONOCIMIENTO DE LOS SERVICIOS ADMINISTRATIVOS FINANCIEROS DE LA ADMINISTRACION
NACIONAL
Asunto:
Incorporación del presupuesto preliminar al proceso de formulación de
presupuesto para el ejercicio 1997.
Por la
presente se remite en planillas adjuntas el material referido al Presupuesto
Preliminar que consta de una enumeración de las principales ventajas que ofrece
la elaboración de dicho Presupuesto, las razones que aconsejan su adopción, las
principales definiciones, los criterios metodológicos a tener en cuenta, la
secuencia lógica de pasos para proceder a la confección del mismo, su relación
con el Presupuesto Base Cero y la forma en que esta actividad ha sido incluida
en el cronograma de elaboración del Presupuesto General de la Administración
Nacional correspondiente al ejercicio 1997.
También
se adjunta una guía donde se reseñan las técnicas que se recomiendan utilizar
para la elaboración del Presupuesto Preliminar, así como la bibliografía que
puede consultarse al respecto.
CIRCULAR
N° 2/96 O.N.P.
BUENOS
AIRES, ABRIL DE 1996
OFICINA
NACIONAL DE PRESUPUESTO
PRESUPUESTO
PRELIMINAR
I.
INTRODUCCION
La
Oficina Nacional de Presupuesto ha decidido incorporar al proceso de formulación
del presupuesto para el año 1997, la propuesta de elaboración del presupuesto
preliminar por parte de las jurisdicciones y entidades de la Administración
Nacional.
La exigua
cantidad de días que tradicionalmente está prevista en el cronograma para la
elaboración de los anteproyectos una vez que se definen los techos
(aproximadamente un mes), de alguna manera obliga a las jurisdicciones y
entidades a tener preparada una versión preliminar de presupuesto, de modo tal
que cuando se toma conocimiento de las asignaciones financieras
correspondientes, los organismos puedan dedicarse únicamente a realizar las
tareas de revisión y ajuste de dicho presupuesto preliminar para ubicarlo dentro
de los topes fijados por el Gabinete Nacional o la Jefatura de
Gabinete.
En la
práctica, aquellos organismos que avanzan en el proceso de presupuestación desde
un comienzo están mejor posicionados para cumplimentar las políticas y normas
que se establezcan y presentar, en consecuencia, un anteproyecto completo y bien
sustentado.
La
elaboración del presupuesto preliminar, como instrumento del proceso de
formulación de presupuesto, será una herramienta de uso de las jurisdicciones y
entidades ya que no se solicitará remisión del mismo a la Oficina Nacional de
Presupuesto. Esta tecnología tiene como finalidad mejorar la capacidad de los
organismos para preparar en tiempo y forma el anteproyecto de ley de presupuesto
elevando la racionalidad en la asignación de los recursos
financieros.
II.
VENTAJAS QUE OFRECE LA ELABORACION
DEL PRESUPUESTO PRELIMINAR
En
función de lo expuesto, pueden enumerarse en forma detallada las ventajas que se
obtendrían con la inclusión en forma explícita del presupuesto preliminar como
una actividad más del cronograma de presupuesto:
1)
Normaliza
la necesaria anticipación del proceso de presupuestación
2)
Permite
una mayor participación de los jefes de las unidades ejecutoras de los programas
al asignar una mayor cantidad de tiempo al proceso de
presupuestación
3)
Eleva la
calidad del anteproyecto del organismo debido a la mayor cantidad de debates que
se producen (sobre políticas,
producción intermedia o final deseada, necesidad de insumos materiales, humanos
y financieros y etc.)
4)
Permite
un ajuste más racional de los créditos y metas en el caso de que los techos
financieros fijados no se correspondan con los niveles previstos por el
organismo. En este sentido la técnica permite modificar el presupuesto sin
afectar indiscriminadamente los programas y las actividades
prioritarias
5)
Facilita
el cumplimiento de los plazos fijados para la presentación del anteproyecto a la
ONP, lo cual posibilita un mejor análisis del mismo por parte del órgano
rector y ulteriormente del
Gabinete.
6)
Mejora el
proceso de planeamiento, propio de la técnica del presupuesto por
programas.
7)
Promueve
la innovación y permite reasignar, con mayor grado de racionalidad y
flexibilidad, recursos hacia los objetivos más
prioritarios.
III.
RAZONES DE SU ADOPCION
Planteada
la necesidad de que los organismos elaboren un presupuesto preliminar como una
actividad más de las que deben realizar para cumplir el cronograma
presupuestario, es preciso establecer las ventajas que traería aparejado para
los organismos y también para la ONP, la decisión de contar no con una, sino con
varias versiones de presupuesto preliminar, es decir anteproyectos que expresen
respectivamente distintos grados de cumplimiento de objetivos políticos: de
mínima, de máxima y otros que estén situados en posiciones intermedias.
En este
punto vale la pena aclarar que el organismo no tendría en realidad que elaborar
varios presupuestos por separado, sino que la idea es que se confeccione un
único presupuesto pero desarrollado computacionalmente de tal modo que por los
propios medios informáticos puedan obtenerse en forma automática distintas
versiones.
En primer
lugar, deben mencionarse los beneficios que se originan para los propios
organismos de la administración nacional, si éstos elaboraran en forma
sistemática varias versiones de presupuesto preliminar. La principal ventaja que
obtendrían es que, tanto las autoridades políticas de las jurisdicciones, como
los jefes de programa conocerían en todo momento cual es el escenario
presupuestario que debe atravesar el organismo con los créditos asignados, lo
cual le permitirá a los responsables de la ejecución de los mismos fijar las
prioridades del caso y obrar en consecuencia.
En
segundo lugar, en la medida que cada organismo conozca en qué partidas, pero
fundamentalmente en qué programas y actividades, deben realizarse los recortes a
fin de minimizar los costos que se deriven de potenciales ajustes, podría
asegurarse una mayor racionalidad en el proceso de asignación de recursos y, por
ende, la optimización de la producción pública con los fondos
disponibles.
Otra
ventaja que cabría subrayar respecto de la elaboración de varias versiones de
presupuesto preliminar es que la propia Subsecretaría de Presupuesto se
aseguraría que los organismos tengan la capacidad para adaptarse rápidamente a
los requerimientos que se les hagan. Es decir, si hubiera contado con toda esa
información para el ejercicio presupuestario del año 1996, se hubiera podido
reducir en forma selectiva el nivel de gasto de cada organismo en particular,
evitándose tener que practicar un ajuste porcentual generalizado en un
determinado objeto de gasto (en este caso de casi 50% en el rubro de bienes y
servicios no personales) sin tener en cuenta la debida priorización de los
programas.
Muchas
veces se fijan niveles de gasto en un rango tal que el organismo se encuentra
imposibilitado de cumplir los objetivos originalmente deseados, por lo que
obligatoriamente debe replantear sus metas priorizando actividades esenciales
para la institución en desmedro de otras que no son tan importantes para los
objetivos de política del organismo. Al contar con varias versiones de
presupuesto preliminar, rápidamente, las autoridades políticas jurisdiccionales
o los jefes de programas podrían ubicarse presupuestariamente, lo cual les
posibilitaría elevar su capacidad de negociación de los créditos dado que pueden
fundamentar rigurosamente los requerimientos. Por otra parte, una vez conocidos
los niveles de crédito asignados, podrán adoptar las medidas que crean
conveniente en función de los cambios que deban realizar respecto de la
producción a ser alcanzada, de modo tal de maximizar la productividad de los
recursos disponibles.
Adicionalmente,
si los presupuestos preliminares se almacenan en la base de datos del organismo,
en la medida que durante el transcurso del ejercicio se modifique
significativamente el presupuesto originalmente autorizado por Ley, también el
organismo podrá readaptar sus objetivos y prioridades a las nuevas asignaciones
financieras que se determinen.
IV.
DISTINTAS VERSIONES DE PRESUPUESTO PRELIMINAR: PRECISIONES
CONCEPTUALES
Para ser
significativas, las versiones preliminares de presupuesto que elabore la
jurisdicción o la entidad de la Administración Nacional deben responder a
situaciones perfectamente diferenciadas: aquella en la que se cumplen
mínimamente los objetivos de política primordiales del organismo (presupuesto
preliminar de mínima); aquella en donde se cumplen todos los objetivos de
política del organismo (presupuesto preliminar de máxima), y aquellas en donde
existe una situación intermedia presupuestaria, es decir se cumplen algunos
objetivos, pero no se prevé alcanzar todos los objetivos que
desearía el organismo (presupuesto preliminar intermedio).
Presupuesto
preliminar de máxima
El
presupuesto de máxima debe entenderse como aquel nivel de gastos y recursos que
permite al organismo, lograr una escala de producción final o intermedia
suficiente como para cumplir con todos -o casi todos- los objetivos de política
presupuestaria sectorial delineados para el ejercicio, tanto aquellos que puedan
caracterizarse como fundamentales como aquellos que sean de orden
secundario.
El
presupuesto de máxima, en la práctica, significaría acrecentar en forma
significativa la actual escala de producción del organismo y, en consecuencia,
elevar los gastos en personal, bienes de consumo, servicios no personales ,
bienes de capital o transferencias.
El
presupuesto de máxima, no obstante lo expuesto, no debe interpretarse como
aquella situación presupuestaria donde deben incrementarse simplemente todos los
gastos presupuestarios, sino que estos egresos deben aumentar al compás de la
necesidad que se tengan de ellos para arribar a una escala de producción
superior. Ahora bien, si el
organismo encuentra mayor eficiencia en una escala de producción superior a la
actual, esto es, que una unidad de producto se obtiene con un menor costo de
producción, o lo que es lo mismo, con un determinado costo de producción se
alcanza una meta productiva superior,
el incremento de la escala puede implicar una suba de gastos pero menos
que proporcional al de la producción.
Presupuesto
preliminar intermedio
El
presupuesto intermedio es aquel nivel de gastos y recursos que posibilita al
organismo acceder a una escala de producción de bienes o servicios finales o
intermedios con los cuales es posible atender la mayor parte de sus objetivos de
política fundamentales. Asimismo,
pueden cumplirse algunos objetivos no esenciales para la existencia del
organismo, pero en ningún caso se asegura el financiamiento necesario para
alcanzar todos los objetivos planteados por la jurisdicción o el
organismo.
El
presupuesto intermedio no necesariamente significa mantener el actual nivel de
gastos o la escala de producción vigente, ello sería producto de una mera
coincidencia. Más bien, se
constataría que para arribar a un presupuesto intermedio, como el anteriormente
definido, es preciso aumentar o reducir la escala de producción actual.
Aumentarla en el caso de que el organismo esté financiando una producción mínima
y disminuirla si está produciendo un nivel de bienes o servicios cercano al
óptimo.
Puede
resultar dificultoso comprender acabadamente el presupuesto intermedio, debido a
que pueden existir discrepancias conceptuales a la hora de definir cuales son
los objetivos -primordiales o
secundarios- que deben ser cumplidos para estar en presencia de un nivel
presupuestario intermedio. Por
ejemplo, un organismo que presta servicios sociales a la comunidad y a la vez
capacita sus propios empleados para la prestación de dichos servicios puede
considerar que ambas actividades son esenciales, pero también puede suponerse
que la primera (la prestación del servicio) hace más a la razón de la existencia
de la entidad que la segunda (la capacitación). Si el criterio que prevalece es este
último, podría argüirse que un presupuesto intermedio es el que permite
financiar adecuadamente la producción de servicios, pero no la capacitación o si
se financian actividades de capacitación se lo hace en forma
mínima.
Presupuesto
preliminar de mínima
El
presupuesto de mínima debe entenderse como aquel nivel de gastos que posibilita
al organismo alcanzar una escala de producción final o intermedia suficiente
para cumplir apenas mínimamente con los objetivos básicos de política
presupuestaria sectorial delineados para el ejercicio. Si el organismo, con los insumos físicos
y financieros destinados para su producción, alcanzara una escala menor a la que
se obtiene con el presupuesto preliminar de mínima estaría imposibilitado de
llevar a la práctica acciones concretas que modifiquen, aunque más no sea
mínimamente, el ámbito de su incumbencia.
En este caso, la subsistencia de la entidad no estaría
justificada.
El
presupuesto de mínima en muchos casos puede significar reducir considerablemente
la escala de producción actual del organismo, y en consecuencia disminuir los
gastos en personal, bienes de consumo, servicios no personales, bienes de
capital y transferencias. Sin
embargo, y pese a la contracción de la operatoria, continuaría justificándose el
accionar del mismo debido a que con los insumos asignados lleva a cabo una
producción, aunque mínima, indispensable para otros organismos o para la
comunidad en general.
El
presupuesto de mínima no debe interpretarse como aquella situación
presupuestaria donde se asegura la disponibilidad de créditos para abonar la
nómina actual de personal de planta y una cierta cantidad imprescindible de
bienes y servicios para el funcionamiento de la entidad, puesto que, aun cuando
dichos gastos estuvieran financiados, podría suceder que el organismo igual se
hallara incapacitado para lograr sus objetivos de política de mínima, esto es,
no contaría con otros insumos necesarios para llevar a cabo una producción
mínima de bienes y servicios.
Como
ejemplo, podría ponerse el caso de un organismo encargado de ejecutar un proceso
productivo, el que para cumplir con sus misiones debería contar, además de los
recursos humanos y materiales que dispone como stock, con materia prima adecuada
para arribar a una escala de producción mínima (dinero para efectuar
transferencias o realizar compras de mercaderías). Si el organismo no dispone de dichos
elementos, no estaría en condiciones de lograr ninguna producción con el
personal disponible y por lo tanto no estaría justificada la existencia de esa
entidad.
V.
CRITERIOS METODOLOGICOS A APLICAR EN LA ELABORACION DEL PRESUPUESTO
PRELIMINAR
Para
contar con un presupuesto preliminar a partir del cual puedan obtenerse varias
alternativas presupuestarias es preciso determinar los niveles de prioridad en
forma descendente partiendo de los objetivos de política presupuestaria, fijando
luego las prioridades entre programas y por último a nivel de actividad y
tareas
Por lo
tanto, el organismo deberá comenzar por listar en orden de importancia los
objetivos de política presupuestaria, especificando claramente cuales políticas
son prioritarias, cuales tienen una importancia media y cuales tienen baja
importancia.
¿Qué
criterio debe seguirse para fijar prioridades en materia de política?. Se debe
partir del concepto de política enunciado en los “Aspectos Teóricos y
Metodológicos del Sistema Presupuestario - 1995”, donde política remite a
aquellos aspectos que trascienden la esfera interna de la organización y se
refieren a cuestiones básicas de la sociedad. La existencia de un organismo se
fundamenta por su contribución al logro de objetivos que rebasan su quehacer
interno.
En este
sentido las prioridades se deberían fijar, teniendo en cuenta la política
econímica y social del Gobierno Nacional, en función de la maximización del
beneficio social, o sea, la eficacia que las diferentes políticas generen y en
consonancia con el objetivo central que da razón de ser al
organismo.
A
continuación de que se priorizan las políticas, deben detallarse los programas,
que también deberán ser calificados como de alta, media o baja prioridad. La
priorización de los programas es relativamente independiente del orden de
importancia que tengan los objetivos, y para ello básicamente debe tenerse en
cuenta la magnitud de la contribución de los mismos a los objetivos de política.
De este modo, pueden existir objetivos de alta prioridad que para su concreción
se establezca la necesidad de ejecutar programas que pueden tener alta, media o
baja prioridad y también objetivos de baja prioridad que también deban
alcanzarse con programas de alta, media o baja prioridad.
Las
prioridades a nivel de actividades se fijan también independientemente de las
jerarquías establecidas en los programas que deben realizarse para cumplir un
objetivo. Por lo tanto, un programa de alta prioridad puede estar conformado por
actividades de alta, media o baja prioridad y un programa de baja prioridad
puede estar desarrollado por actividades de alta, media o baja
prioridad.
También
debería procederse a desagregar lo más exhaustivamente posible todas las
actividades que deben realizarse en las categorías equivalentes a programa
(actividades centrales y comunes). Las actividades centrales o comunes afectan
en forma simultánea a más de un programa y, por ende, a distintos objetivos de
política. Por lo tanto, la
expansión o reducción de las mismas dependerá sustancialmente de los
ajustes que se efectúen en los programas y actividades que guardan con las
mismas una relación de condicionamiento. Por ello, no son susceptibles de
priorización y sus recortes o expansión estarán atados a la suerte de los
programas sustantivos.
Por
último deberán detallarse las “tareas” o “trabajos” en que se descomponen las
actividades jerarquizando las mismas según un orden de prioridad. También en
este caso, las tareas podrán ser de alta, baja o media prioridad,
independientemente de la prioridad que tenga la actividad de la cual forma
parte.
Se define
prioridad como un orden de importancia que depende, en el primer nivel, de la
relación que se establece entre los productos de salida del proceso productivo
del organismo y sus objetivos generales de política y, en un segundo nivel, de
la relación entre los insumos y los referidos productos.
Una vez
identificadas las alternativas de producción terminal y producción intermedia
que dan origen a los programas y actividades respectivamente, se debe analizar
su adecuación a los objetivos del organismo, las alternativas operativas
posibles, el nivel de intensidad y los resultados cuantitativos esperados. En
este sentido, las alternativas se pueden diferenciar entre establecer formas de
operación que resulten más económicas para alcanzar el mismo objetivo,
introduciendo modificaciones en las prácticas existentes o incorporando nuevos
métodos con el objetivo de reducir costos o planteando nuevas actividades que
por su factibilidad técnica, operativa y económica pueden ocupar el lugar de
propuestas de alta prioridad.
Como
criterio general para establecer prioridades entre programas y entre
actividades, se propone utilizar como metodología, la técnica de Presupuesto
Base Cero. La misma consiste, en forma resumida, en una evaluación de los
programas y actividades sobre la base de su relación Costo - Beneficio y otros
criterios razonables para la asignación de recursos presupuestarios según una
escala de prioridades, como si se tratara del primer año; es decir, partiendo de
cero y sin referencia a períodos anteriores.
Una
desagregación a nivel de tareas ayuda en forma notable a implementar la
metodología de Presupuesto Base Cero de manera complementaria y totalmente
compatible con los principios y categorías del Presupuesto por Programas.
Asimismo, este nivel de desagregación y priorización permitirá detectar la
asignación ineficiente de recursos en materia organizativa por duplicación de
tareas, efectuar una evaluación mucho más exhaustiva del nivel de capacidad
productiva del organismo, además de poder realizar análisis costo - beneficio a
partir de contar con una información detallada, de mínimo nivel, de todos los
elementos que interviene en el proceso productivo del
organismo.
Otro
punto a considerar es cuando el objeto del gasto por su propia naturaleza tiene
la característica de ser muy rígido a corto plazo, tal es el caso del gasto en
personal, servicio de la deuda o transferencias que deben realizarse
obligatoriamente por ley. En estos casos la técnica utilizada para elaborar el
presupuesto preliminar debe ser lo suficientemente flexible como para no impedir
la eliminación del programa o la actividad o la tarea que por su baja prioridad
se desea recortar, motivo por el cual el organismo deberá optar entre la
alternativa de reasignar el gasto a otra actividad o de establecer un período de
liquidación que posibilite la supresión de dicho gasto.
Concluyendo,
la ventaja de establecer un presupuesto preliminar abierto por prioridades,
tanto en programas como en actividades es que permite establecer en forma rápida
distintas alternativas, ya sea para expandir los alcances de la política
presupuestaria a través de la reasignación de recursos hacia actividades de
mayor impacto y efectividad, como efectuar ajustes en función de las
restricciones financieras de manera tal de que no se afecten los programas y las
actividades que el organismo considere prioritarios.
Por tal
motivo, la identificación de prioridades en las categorías programáticas puede
implicar la supresión completa o el recorte parcial de aquellas actividades o
programas de baja prioridad. En términos generales, un programa catalogado de
baja prioridad debería tender a
desaparecer. (En el anexo 1 se ejemplifican en forma gráfica distintas
alternativas entre las que un organismo puede optar a fin de reasignar recursos
dentro de las limitaciones presupuestarias.). Sin embargo, aunque menos
preferible, puede existir la alternativa de eliminar actividades no prioritarias
para pasar de un presupuesto de máxima a uno intermedio o a uno de mínima (ver
anexo 2)
VI.
SECUENCIA LOGICA DE PASOS EN LA ELABORACION DEL PRESUPUESTO
PRELIMINAR
Los pasos
que deben encararse secuencialmente para confeccionar un presupuesto preliminar,
que a su vez pueda transformarse en cualquiera de sus versiones, deberían ser,
entonces, los siguientes:
a) Fijar
las políticas presupuestarias del organismo
b)
Efectuar la apertura programática consistente con dichas políticas y su
organización administrativa, desagregando todos los programas y detallando
pormenorizadamente todas las actividades que pueden ser
identificadas.
c)
Asignar el grado de importancia de cada tarea, actividad y programa fijando tres
niveles: A (alta prioridad), M (prioridad media) y B) (Baja prioridad)
d)
Cuantificar las producciones finales e intermedias a llevar a cabo mediante la
ejecución de los programas y actividades
e)
Proyectar en cantidades físicas y financieras los insumos (o gastos) que deben
ser financiados para alcanzar el nivel de producción en cada una de las
actividades y programas
f)
Efectuar el cálculo de recursos propios o afectados que serán destinados a
financiar la producción del organismo, incluyendo los préstamos, transferencias
o donaciones a los que potencialmente podrían accederse
g)
Estimar por diferencia el gasto que debería ser financiado con recursos del
Tesoro Nacional
VII.
PRESUPUESTO PRELIMINAR Y PRESUPUESTO BASE CERO
Uno de
los vicios mas frecuentes y generalizados en la formulación de presupuestos
públicos es la repetición del presupuesto del año anterior o con pequeñas
variantes del mismo. Ello establece un serio condicionante a la formulación de
presupuestos alternativos significativos, como los que se pretenden
aquí.
Consecuentemente,
en el proceso de formulación del presupuesto preliminar es conveniente recurrir
a la técnica del presupuesto base cero (PBC), o similares.
Razones
del uso del Presupuesto Base Cero
Como toda
técnica, el PBC tiene una serie de criterios y procedimientos para presupuestar,
para cuyo seguimiento se recomienda el material incluido en la bibliografía.
Pero, lo que aquí interesa resaltar es la filosofía del PBC, que tiene tres
principios básicos:
1. Es
necesario replantear a fondo lo que se está haciendo con el presupuesto actual;
desmenuzarlo y fundamentarlo con el mismo ahínco con que se justificaría un
requerimiento adicional.
2. Los
recortes tienen que ser selectivos y no generalizados. Para ello hay que tener
un conjunto evaluado de programas y actividades debidamente priorizadas (paquete
de decisiones) entre los que se seleccionan los que habría que desactivar. Ante
una restricción de recursos, o un análisis costo - beneficio negativo, los
recortes deben afectar determinados programas o actividades (los menos
prioritarios) y no a todos. Este principio también es válido en sentido opuesto.
Un incremento de presupuesto tiene que tener una aplicación clara, con productos
identificables y no diluirse como un simple aumento
general.
3. Para
la priorización de programas y actividades se requiere la participación de toda
la organización. En particular, es imprescindible la participación de los jefes
de programas, actividades y proyectos pues, de otra manera, sería imposible el
conocimiento detallado de las operaciones, tal como lo indica el PBC para el
armado de paquetes de decisiones.
Niveles
de Aplicación del PBC
El PBC se
puede aplicar a distintos niveles de replanteo de las operaciones de una
organización. Se pueden tipificar dos grandes grupos:
A. Nivel
estructural. Se revisa la razón de ser del organismo en cuestión y su
dimensionamiento. El replanteo de este nivel es conveniente hacerlo inicialmente
mediante la técnica del PBC, pero no es necesario repetirlo anualmente. La
frecuencia la indicará la experiencia y la naturaleza del
organismo.
B. Escala
de producción. Se revisa el tipo y volumen de producción (y metas) sin un cambio
sustancial de la estructura y dimensión del organismo. La revisión a este nivel
es conveniente que sea anual.
A
continuación, se explicitarán los principales típicos que se deberían replantear
a fondo utilizando la técnica del presupuesto base cero.
1.
Objetivos, responsabilidad primaria y acciones
Hay que
pensar de cero la razón de ser del organismo
2. Bases
Legales
Precisar
cuales son las normas legales que apuntalan su existencia, es decir, donde
estarán contenidos los objetivos, responsabilidad primaria, estructura y
financiamiento.
3.
Políticas presupuestarias
Esclarecidos
los objetivos esenciales de largo plazo del organismo y el sustento legal del
mismo, se necesita explicitar qué parte de ellos se llevarán a cabo en el
próximo ejercicio presupuestario y por qué
(fundamentarlo).
4.
Categorías programáticas
Establecidos
los puntos 1 a 3, se entraría ya en la faz operativa de la presupuestación y, en
este sentido, la apertura programática es el puntapié inicial. Una eficiente
apertura programática - aquella que ha tenido en cuenta los puntos 1 a 3- es
condición necesaria para la formulación de un presupuesto flexible, que haga
manejable distintas versiones del mismo.
La
desagregación del accionar del organismo en programas, actividades y tareas y
sus priorizaciones, como se expusiera en el punto V, junto con una clara
imputación del objeto del gasto y asignación de recursos humanos a cada
categoría programática, permitirá establecer por donde pasarían los recortes si
los hubiera, o cuales son los programas y gastos que se agregarían en una
hipótesis de máxima o intermedia.
Un PBC
que tomara en cuenta los típicos 1 y 2 llevaría a un replanteo del tipo A., en
tanto que si las variantes se centraran en los tópicos 3 y 4 únicamente se
estaría en una revisión del tipo B.
Cualquiera
sea el tipo de variante que se trabaje, un elemento a tener en cuenta son las
restricciones externas al organismo. Se entiende por tal las normativas legales
generales a las que se tiene que someter (ley de administración financiera, de
contrataciones, régimen escalafonario, ley de inversiones públicas, etc.).
También se incluye el flujo de informaciones que debe proveer regularmente hacia
afuera (liquidación de haberes, planta ocupada, datos para la DGI, para el
sistema previsional, etc.).
Es de
notar que para hacer la ejercitación del presupuesto preliminar no es necesario
tener acabados los cambios en los cuatro tópicos. Basta con tener lineamientos
claros en cada uno de ellos y las cuantificaciones mínimas indispensables que
requiere el PBC.
Un
aspecto ineludible a considerar en la versión de presupuesto preliminar,
referido a una organización que se esté reduciendo o reestructurando sin
reducirse, es la transición. Ningún cambio es instantáneo, por lo tanto la
transición debe formar parte de la presupuestación. Cuanto personal y en que
tiempo se va a reducir, la venta de activos fijos, completar compromisos
contraídos , etc. son cuestiones que se deben incluir en el
presupuesto.
Cabe
señalar que versiones del presupuesto preliminar donde un organismo determinado
resigna objetivos o funciones no significa que estos desaparezcan. Bien pueden
ser asumidos por otra organización estatal o ser privatizados o concesionados.
Las priorizaciones del presupuesto preliminar que nos ocupa son las que se
efectúan dentro de la jurisdicción u organismo
descentralizado.
Finalmente,
es oportuno aclarar que en la formulación de distintas versiones de presupuesto
preliminar no en todos los casos hay que recurrir a la técnica del PBC para el
tipo A. Puede haber ajustes en los gastos que no impliquen un cambio estructural
de la organización sino simplemente distintas escalas de producción (tipo B).
Sin embargo, es muy importante precisar si se está en una instancia u otra. Un
recorte presupuestario ejecutado bajo el supuesto de un simple cambio en la
escala de producción será ineficiente si el sustrato del ajuste requiere un
cambio organizacional (cambio en la función de
producción).
En otro
orden, si no se usa la técnica PBC, o similar, un mero recorte financiero puede
llegar a significar la casi parálisis del organismo, si se deja el resto como
está.
VIII.
INCLUSION DE LA ACTIVIDAD “PRESUPUESTO PRELIMINAR” EN EL CRONOGRAMA DE
ELABORACION DEL PRESUPUESTO
La
elaboración del presupuesto preliminar estará incluida dentro del listado de
actividades que deben realizarse para formular el presupuesto general de la
administración nacional, con una fecha de inicio tentativa a principios de
abril, en el mismo momento que se solicitan las políticas presupuestarias
sectoriales, las modificaciones de aperturas programáticas y el cálculo de
recursos.
La fecha
de finalización de la actividad será necesariamente anterior a la comunicación de los techos
presupuestarios, esto es, fines del mes de junio, de modo tal que los organismos
cuentan con tres meses aproximadamente para elaborar una versión preliminar del
presupuesto.
La
aplicación del presupuesto preliminar, con las características arriba señaladas,
supone un desarrollo de mediano y largo plazo. Por ello, para que tenga
principio de aplicación para el presupuesto 1997 se presentan en los anexos 3a,
3b y 3c formularios tipo ideados para realizar la programación del gasto
estableciendo prioridades de manera muy simplificada.
Es
importante subrayar que no se requerirá a los organismos que remitan el producto
a la ONP, sino que simplemente se los insta a cumplir con la normativa a fin de
poder efectuar en los plazos fijados la elaboración del anteproyecto de
presupuesto.
GUIA PARA
LA UTILIZACION DE LAS TECNICAS INCLUIDAS EN LA BIBLIOGRAFIA DEL PRESUPUESTO
PRELIMINAR
El
propósito de la presente guía es facilitar la adopción de las distintas técnicas
de análisis y toma de decisiones que pueden ser utilizadas en la confección del
presupuesto preliminar y que se complementan perfectamente con la técnica de la
programación presupuestaria
La
Oficina Nacional de Presupuesto, en su rol de órgano rector del Sistema de
Presupuesto, considera que una instrumentación correcta del presupuesto
preliminar requiere que las entidades y organismos de la Administración Nacional
cuenten con adecuado asesoramiento, de modo tal que el resultado final pueda
obtenerse minimizando costos y potenciando los beneficios.
Para
presentar las técnicas de presupuesto lo más sencillamente posible a fin de que
la aplicación de las mismas no requiera de conocimiento teóricos profundos, la
presente guía describe en forma sintética las principales metodologías, el grado
de profundidad con que pueden ser aplicadas las mismas y como se compatibilizan
tales herramientas con el presupuesto por programas.
No
obstante ello, debe recalcarse que aquellas técnicas de presupuesto que no son
abordadas por la presente guía no significa que deban ser dejadas de lado. En todo caso, el único requisito que se
pretende es que las que se usen sean compatibles con los propósitos perseguidos
con la elaboración del presupuesto preliminar y con el presupuesto por programas
(PPP).
1)
TECNICAS RECOMENDADAS PARA LA CONFECCION DEL PRESUPUESTO
PRELIMINAR
Las
técnicas adecuadas para llevar a cabo el presupuesto preliminar por el potencial
que tienen para realizar un replanteo profundo del accionar del organismo y a su
vez por el elevado grado de complementariedad que puede desarrollarse con la
programación presupuestaria son las siguientes:
a)
Sistema de Análisis y Desarrollo de la Capacidad Institucional
(SADCI)
b)
Presupuesto Base Cero
c)
Reingeniería de objetivos y procesos
a)
Sistema de Análisis y Desarrollo de la Capacidad Institucional
(SADCI)
El SADCI
es una sistema orientado básicamente al desarrollo institucional. Posibilita
determinar con claridad los objetivos del organismo, su cuantificación,
priorizarlos con rigurosidad, cuantificar los recursos necesarios para llevarlos
a cabo y detectar las insuficiencias de organización para cumplir los objetivos
(que en la jerga del SADCI se denominan déficit de capacidad
institucional)
Este
método fue desarrollado por el Banco Mundial en la segunda mitad de la década
del 80 cuando se encaró el problema de la baja capacidad de los organismos (y de
las unidades ejecutoras) de gerenciar los proyectos que financiaba el Banco, lo
cual generaba todo tipo de problemas: sobrecostos, subejecuciones, objetivos no
logrados, etc.
El SADCI
puede ser utilizado en la medida que se tome la decisión de aumentar los
productos con los mismos recursos u obtener los mismos productos a un menor
costo, o ambos. Una vez tomada la decisión se procede a elaborar un flujo de
información en la cual se expresa:
i) Los objetivos de desarrollo (resultados
esperados)
Debe
precisarse claramente el objetivo a lograr, y para ello es necesario cuantificar
el producto deseado y a la vez definir los impactos esperados para cada uno de
los aspectos cuantitativos correspondientes al objetivo. Finalmente, deben
identificarse los beneficiarios (y/o víctimas siguiendo la terminología que
utiliza el Sistema). Cuando el SADCI es activado los objetivos necesariamente
son una aproximación que deberá ser constantemente mejorada a medida que se
incrementa la información y se acrecienta la capacidad institucional como
consecuencia de la implantación del Sistema.
ii) Los recursos necesarios para obtener los
objetivos o resultados
Una vez
fijados los objetivos deben establecerse las cantidades de recursos financieros
disponibles para lograrlos así como su distribución, es decir la cantidad total
de unidades monetarias para cada concepto de gasto y el nombre de las unidades
ejecutoras y administrativas responsables del manejo y administración del
dinero.
iii) Las tareas que deben realizarse para
plasmar los objetivos y los responsables de las mismas
La
descripción de las tareas es el instrumento más original e importante del SADCI,
debido a que en ella se especifica detalladamente que debe hacerse para obtener
un determinado resultado intermedio, en qué fecha debería hacerse, cuáles son
las adquisiciones de bienes y servicios necesarios lograr un determinado
objetivo y quienes son los responsables de la ejecución de cada tarea. Para
identificar los responsables se elabora lo que el Sistema denomina como Mapa de
Relaciones Interinstitucionales, donde se muestran no las relaciones internas
sino las relaciones entre entidades ejecutoras.
iv) Los déficit de capacidad que posee la
institución
Definidos
los objetivos, los recursos que se movilizarán y las tareas que deben
realizarse, debe investigarse si la institución tiene la capacidad de cumplir la
responsabilidad asignada de manera adecuada y eficiente. Se detecta el problema,
como afectará el mismo la ejecución de las tareas y, por último, cuál es la
gravedad del déficit.
Los
déficit pueden estar originados en las reglas de juego (sistema de gobierno,
constitución, legislación, reglamentaciones, modelo cultural imperante, etc),
las relaciones interinstitucionales (superposición de responsabilidades, mala
comunicación entre dos instituciones responsables que deben cooperar entre sí,
deficiente delimitación de responsabilidades, forma de trabajar, etc), en la
organización interna (distribución de funciones, flujo de relaciones internas,
reglas de juego, manuales, procedimientos y estilos gerenciales, etc), la
política de personal (la falta de perspectivas), sistema de remuneraciones
(bajos salarios y compensaciones inadecuadas) y las habilidades individuales
(falta de capacidad gerencial y de habilidad profesional)
Una vez
completados todos los pasos, el SADCI permite entonces definir la estrategia
institucional y las alternativas que existen para corregir los déficit y lograr
los objetivos. Si la institución determina que no existe capacidad suficiente
para lograr un determinado objetivo debe renunciar o modificar el mismo o,
alternativamente, debe aumentar su capacidad al nivel requerido para la
obtención del resultado. Finalmente puede hacer ambas cosas: disminuir la
ambición puesta en el objetivo y adecuar la capacidad en forma concordante para
alcanzar el mismo.
b)
Presupuesto Base Cero
El PBC
persigue esencialmente la racionalización en la asignación de los recursos y la
reducción de los gastos a corto plazo. Su autor Phyrr define a esta técnica como
un proceso operativo de planeamiento y presupuestación que requiere que cada
gerente justifique sus demandas presupuestarias desde cero, sin considerar los
períodos anteriores, es decir debe siempre justificarse las causas por las que
se planifica gastar una determinada cantidad de dinero.
Mediante
esta técnica se asignan prioridades para jerarquizar la actividades que se
desean llevar a cabo sobre la base de su relación costo-beneficio, de modo tal
que pueda o bien reducirse el presupuesto sin afectar las actividades
prioritarias, o bien reasignarse recursos a las actividades más rentables o bien
reducirse costos sin afectar las operaciones.
El
desarrollo metodológico del PBC podría ser esquematizado en el cumplimiento de
dos etapas:
i) Identificación de las unidades de actividad
o preparación de los “paquetes de decisión”
Debe
analizarse y describirse todas las actividades existentes o nuevas en un
documento que se denomina “paquete de decisión”, de manera que las mismas puedan
evaluarse, clasificarse por su importancia y decidir si se aprueban o no. El paquete de decisión debe contener
información referida a:
- Metas y objetivos
-Consecuencias de no adoptar la actividad propuesta
-Medidas de rendimiento
-Otros posibles cursos de acción
-Costos y beneficios
Al
preparar el paquete de decisión deben analizarse las distintas formas para
llevar cabo la actividad (descentralización versus centralización, producción
directa o a través de terceros, etc) a fin de seleccionar la mejor y descartar
las demás. Por otra parte, deben identificarse los distintos niveles de esfuerzo
requeridos para realizar la actividad, con lo cual es preciso confeccionar un
paquete de decisión para cada uno de los esfuerzos
establecidos.
Al
determinarse el nivel mínimo de gastos para cada paquete de decisión, se está
obligando a considerar y evaluar un nivel de gastos inferior al actual, así como
la posibilidad de eliminar una actividad o de decidir entre varios niveles de
esfuerzo.
ii)
Clasificación de los paquetes de decisión
Se debe
realizar un análisis de costos y beneficios o una evaluación subjetiva, a fin de
evaluar y clasificar los paquetes según su orden de importancia, De este modo,
podrá decidirse cuánto debe gastarse y en qué debe gastarse. Una vez que se han
clasificado los paquetes, podrá tomarse la decisión de asignar las recursos, los
que se volcarán a las actividades más importantes ya sean nuevas o existentes. A
medida que aumenta la lista de actividades a desarrollar, también aumentará el
costo a realizar, por lo tanto, la decisión estará en cortar en un punto de la
lista en donde los costos han sobrepasado los beneficios
Dado que
la evaluación y clasificación de los distintos paquetes de decisión en
comparación con los otros paquetes que compiten por obtener la asignación de
recursos se basan en el análisis costo-beneficio, debe obtenerse un mínimo de
información de costos, aunque la misma podrá ampliarse si es que se desea contar
con mayores elementos que sean útiles a la hora de tomar las decisiones en
materia de asignación de recursos.
Por su parte, en la descripción de los beneficios -tal vez el aspecto más
déficil de los paquetes- deben identificarse los resultados tangibles y la forma
en que el paquete logrará el propósito estipulado.
c)
Reingeniería de objetivos y procesos
La
reingeniería pretende explicar como deben transformarse las organizaciones con
dificultades -poco competitivas, deficitarias- en competitivas y rentables. Ello
implica la introducción de cambios profundos y radicales para corregir las
causas que afectan la performance de la organización.
La
reingeniería debe utilizarse cuando se desea un cambio profundo ya sea en lo
estratégico, en lo estructural o en lo operativo. Sin embargo, también puede
aplicarse a uno o más sectores de una organización cuando ellos son de cierta
envergadura y relativamente autosuficientes en la faz
operativa.
El
esquema general de un programa de reingeniería consta de cuatro
fases:
i)
Diagnóstico de la realidad
La
primera fase se centraliza en determinar las causales que influyeron en el
deterioro de la performance de la organización. Para llevar a cabo el
diagnóstico debe realizarse, en primer lugar, un prediagnóstico que incluye el
momento en que se toma contacto con
las dificultades hasta que las primeras impresiones son comunicadas a la
dirección de la organización. Para ello, se encara la evaluación
económica-financiera y operativa y el relevamiento con los principales jefes,
así como la realización de visitas a las instalaciones.
La
segunda fase consiste en realizar un diagnóstico detallado de la realidad. En
este caso se estudiarán en detalle aquellos temas, funciones, actividades o
áreas funcionales que pudieren haber llamado la atención en el
prediagnóstico. Se deberá abarcar
tanto la performance pasada de la organización como sus proyecciones en el
futuro, pudiéndose incluir temas tales como los que tienen que ver con las
estrategias seguidas respecto de la estructura organizativa, cultura
organizacional, producción, recursos humanos, estructura económico-financiera y
sistemas de información.
La
tercera fase corresponde a la elaboración del cuadro de diagnóstico. Se
interpretan cada uno de los diagnósticos, se los integra y se formula una
estrategia general, poniendo de manifiesto los síntomas de las problemáticas y
las causales profundas que han originado las mismas, intentando discriminar las
que provienen en forma exógena a la organización (aquellas sobre las cuales la
empresa no puede actuar) de las que son endógenas.
ii)
Planeamiento de la emergencia para la estabilización
El plan
de emergencia para la estabilización es el documento en el cual se identifican
las acciones necesarias para lograr que el proceso de deterioro no continúe y
tenga que afrontarse un cuadro más problemático que el vigente. También se
detallan las acciones que corresponden al planeamiento de la emergencia, es
decir la reingeniería de las acciones a nivel estratégico, estructural y
operativo, así como los efectos que producen cada una de estas acciones. Por
último, se procede a comunicar el diagnóstico detallado de la realidad y del
plan de emergencia a quienes tendrán la responsabilidad de autorizar y ejecutar
el programa de reingeniería.
iii)
Implantación de cambios:
En esta
fase corresponde implantar los cambios descriptos en el plan de emergencia para
la estabilización. La implantación de los mismos significará romper muchas veces
con las estrategias políticas, procesos gerenciales y prácticas del pasado que
llevaron al deterioro de la organización. Se procede a cambiar en aspectos tales
como estrategia organizacional, producción, recursos humanos, sistemas
informativos, tecnología y cultura organizacional. En esta etapa es fundamental
el liderazgo que se ejerza desde la c·pula de la organización, requisito
necesario para desplegar la autoridad que se requiere para llevar a cabo los
cambios.
El equipo
gerencial para la crisis debería estar formado preferentemente por personas
ajenas a la empresa, altamente competentes y motivados por la oportunidad del
logro. Este equipo debe interactuar con miembros de la organización que tengan
antignedad y conozcan la misma y que estén motivados por preservar la
estabilidad.
iv)
Planeamiento del crecimiento y del desarrollo
En esta
fase se realiza el posicionamiento que permite la consolidación y la
reingeniería necesaria para lograr el crecimiento y el desarrollo de la
organización en el largo plazo.
2)
COMPATIBILIZACION DE LAS TECNICAS RECOMENDADAS CON LA PROGRAMACION
PRESUPUESTARIA.
Las
distintas técnicas anteriormente reseñadas pueden ser aplicadas juntamente con
la técnica del presupuesto por programas, es decir no son excluyentes sino
complementarias
En el
caso del SADCI, la aplicación del Sistema permitirá detectar las posibilidades
reales de alcanzar un determinado objetivo en función de los déficit que
existan. Dependiendo de la magnitud de los déficit identificados, el organismo
podrá eliminar su objetivo o reformularlo.
Una vez que estßn definidas las estrategias, esto es, identificados los
objetivos y debidamente priorizados los mismos, es posible utilizar la
programación presupuestaria para distinguir los programas y actividades que
deberán realizarse.
Dado que
el SADCI requiere identificar las tareas que deben ser llevadas a cabo para
cumplir los objetivos trazados, así como los recursos que son necesarios y los
responsables de la gestión de los mismos, dicha información puede ser utilizada
en la programación presupuestaria para cubrir la información correspondiente a
la producción final e intermedia y obtener para cada apertura programática la clasificación por objeto del
gasto.
En el
caso del Presupuesto Base Cero, también es posible encontrar una perfecta
compatibilización con la técnica del Presupuesto por Programa. Dado que el PBC
requiere identificar en cada paquete de decisión las metas o resultados, los
esfuerzos mínimos y los costos y beneficios, toda esta información puede
traducirse a un esquema de programación presupuestaria que desglose para los
programas y demás categorías el gasto por objeto, por programas e incluso
traducir la información existente en dichos paquetes, referida a
resultados, en términos de metas y
volúmenes de trabajo.
Por su
parte, la reingeniería también es compatible con la programación presupuestaria,
aunque cabe denotar que aquí se plantea con anterioridad a la aplicación de
ésta, la implantación de cambios profundos que atañen a aspectos de estrategia,
organizacionales y operativos. Los cambios producidos pueden reflejarse en una
nueva apertura programática y la correspondiente imputación del objeto del
gasto.
3)
APLICACION SIMPLIFICADA DE LAS TECNICAS
Si bien
en teoría las técnicas precedentemente reseñadas pueden ser aplicadas en todos
los organismos de la Administración Nacional, algunas veces es preferible
adoptar algunas recomendaciones en forma simplificada, dependiendo ello de la
cantidad de cambios que se deseen introducir en la organización, la magnitud del
organismo en términos de la cantidad de personas ocupadas, el grado de
eficiencia productiva con que se viene operando, etc.
En este
caso, algunos formularios que deben completarse para aplicar la técnica en forma
completa deben ser suprimidos o simplificados, o en su defecto completarlos pero
para algunos aspectos parciales que atañen al desenvolvimiento del organismo
(vg: algunos objetivos, algunas actividades,etc).
Cabe
señalar que las técnicas propuestas tienen ya alguna experiencia de aplicación
en la Administración Nacional. Así, el SADCI es utilizado por la Subsecretaría
de Minería de la Secretaría de Industria y Minería del Ministerio de Economía y
Obras y Servicios Públicos; el Presupuesto Base Cero fue aplicado por la
Fundación de Investigaciones Económicas Latinoamericanas (FIEL) en su estudio
“Propuestas para la Reestructuración de la Administración Pública Nacional”
(noviembre de 1995); y la reingeniería de procesos fue parcialmente utilizada
por la consultora internacional KPMG en el desarrollo de los SIDIF locales de
los casos piloto: Ministerio del Interior, Ministerio de Economía y Obras y
Servicios Públicos y Ministerio de Salud y Acción Social.
En otro
orden, hay que tener presente que las técnicas reseñadas usan cierta
terminología de la programación presupuestaria pero con un concepto diferente.
Los términos “proyecto” y “actividad” tienen en el SADCI un significado más
amplio e impreciso que en el Presupuesto por Programas. Otro tanto ocurre con la
palabra “actividad” en el Presupuesto Base Cero. Por ello, en la utilización de
esas técnicas para la elaboración del presupuesto preliminar convendróa cambiar
los nombres. Sin embargo, una vez que se tiene conciencia de que se está
hablando de cosas algo distintas, la información que se sistematice bajo
aquellas categorías analíticas puede perfectamente traducirse a las categorías
del Presupuesto por Programas.
Finalmente,
el presupuesto preliminar, con el complemento de técnicas como las aquí
propuestas, es una herramienta de formulación presupuestaria que se instituye en
forma permanente. Es decir, no cabe esperar resultados muy relevantes en el
corto plazo, sino que su maduración se logrará en el mediano y largo plazo. Para
su definitiva inserción se requiere decisión política, perseverancia y mucha
capacitación en las técnicas complementarias. Por ello, como se expresa en el
punto VIII., a fin de que tenga principio de aplicación para el presupuesto de
1997 se propone un formulario simplificado. En el futuro, el presupuesto
preliminar será profundizado.
ANEXO I
Presupuesto
preliminar por prioridades, ejemplos
Presupuesto
de Máxima |
|
Presupuesto
Intermedio |
|
Presupuesto
de Mínima | |||
Programa
1 |
Actividad
1-A |
|
Programa
1 |
Actividad
1-A |
|
Programa
1 |
Actividad
1-A |
Prioridad
A |
Actividad
2-A |
|
Prioridad
A |
Actividad
2-A |
|
Prioridad
A |
Actividad
2-A |
|
Actividad
3-M |
|
|
Actividad
3-M |
|
|
Actividad
3-M |
|
Actividad
4-B |
|
|
Actividad
4-B |
|
|
Actividad
4-B |
Programa
2 |
Actividad
1-A |
|
Programa
2 |
Actividad
1-A |
|
Programa
2 |
Actividad
1-A |
Prioridad
A |
Actividad
2-A |
|
Prioridad
A |
Actividad
2-A |
|
Prioridad
A |
Actividad
2-A |
|
Actividad
3-A |
|
|
Actividad
3-A |
|
|
Actividad
3-A |
Programa
3 |
Actividad
1-A |
|
Programa
3 |
Actividad
1-A |
| ||
Prioridad
M |
Actividad
2-M |
|
Prioridad
M |
Actividad
2-M |
| ||
Programa
4 |
Actividad
1-A |
|
| ||||
Prioridad
B |
Actividad
2-B |
|
| ||||
|
Actividad
3-B |
|
| ||||
|
Actividad
4-B |
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
A = Alta Prioridad
M = Media Prioridad
B = Baja Prioridad
El
presupuesto de máxima incluye todos los programas y actividades cualquiera sea
su orden de prioridad.
Al
pasar a un presupuesto intermedio se presentan distintas posibilidades de
ajuste, en el caso observadose elimina en forma integra el programa 4 de baja
prioridad.
Considerando
la necesidad de realizar un ajuste mayor, en un presupuesto de mínima, podría
darse el caso de que se recorte integramente el programa 3 y el programa
4.
ANEXO
II
Presupuesto
preliminar por prioridades, ejemplos
Presupuesto
de Máxima |
|
Presupuesto
Intermedio |
|
Presupuesto
de Mínima | |||
Programa
1 |
Actividad
1-A |
|
Programa
1 |
Actividad
1-A |
|
Programa
1 |
Actividad
1-A |
Prioridad
A |
Actividad
2-A |
|
Prioridad
A |
Actividad
2-A |
|
Prioridad
A |
Actividad
2-A |
|
Actividad
3- M |
|
|
Actividad
3-M |
|
|
Actividad
3-M |
|
Actividad
4-B |
|
Programa
2 |
Actividad
1-A |
|
Programa
2 |
Actividad
1-A |
Programa
2 |
Actividad
1-A |
|
Prioridad
A |
Actividad
2-A |
|
Prioridad
A |
Actividad
2-A |
Prioridad
A |
Actividad
2-A |
|
|
Actividad
3-A |
|
|
Actividad
3-A |
|
Actividad
3-A |
|
Programa
3 |
Actividad
1-A |
|
Programa
3 |
Actividad
1-A |
Programa
3 |
Actividad
1-A |
|
Prioridad
M |
Actividad
2-M |
|
Prioridad
M |
|
Prioridad
M |
Actividad
2-M |
|
Programa
4 |
Actividad
1-A |
|
|
|
Programa
4 |
Actividad
1-A |
|
Prioridad
B |
|
| ||
Prioridad
B |
Actividad
2-B |
|
|
|
| ||
|
Actividad
3-B |
| |||||
|
Actividad
4-B |
|
|
|
|
|
|
A = Alta Prioridad
M = Media Prioridad
B = Baja Prioridad
El
presupuesto de máxima incluye todos los programas y actividades cualquiera sea
su orden de prioridad.
Al
pasar a un presupuesto intermedio se presentan distintas posibilidades de
ajuste, en el caso observado se eliminan las actividades de baja prioridad de
todos los programas.
Considerando
la necesidad de realizar un ajuste mayor, en un presupuesto de mínima, podría
darse el casode que se recorte integramente el programa 4 y las actividades de
baja prioridad de los restantes programas.
ANEXO
III A
Formulario para la elaboración del
presupuesto preliminar
(1) |
|
|
|
|
|
|
FORMULARIO PARA LA ELABORACION |
| |
|
|
DEL PRESUPUESTO PRELIMINAR |
| |
|
|
|
|
|
JURISDICCION: |
|
PRESUPUESTO
1997 | ||
ENTIDAD: |
|
FECHA
/
/ | ||
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
O B J E T I V O |
P R O G R A M A |
DENOMINACION Y
DESCRIPCION |
P R I O R I D A D |
IMPORTE |
(2) |
(3) |
(4) |
(5) |
(6) |
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
´(7)
TOTAL |
|
|
|
ANEXO
III B
Formulario para la elaboración del
presupuesto preliminar
(1) |
|
|
|
|
| ||||
|
|
|
FORMULARIO
PARA LA ELABORACION |
|
| ||||
|
|
|
DEL PRESUPUESTO
PRELIMINAR |
|
| ||||
|
|
|
|
|
| ||||
|
|
|
|
|
| ||||
JURISDICCION: |
|
|
PRESUPUESTO 1997 | ||||||
ENTIDAD: |
|
|
FECHA
/
/ | ||||||
|
|
|
|
|
| ||||
|
|
|
|
|
| ||||
|
|
|
|
|
| ||||
|
|
|
|
|
| ||||
P R O G R A M A
|
P R O Y E C T O |
A C T I V I D A D |
DENOMINACION Y
DESCRIPCION |
P R I O R I D A D |
IMPORTE | ||||
(2) |
(3) |
(4) |
(5) |
(6) |
(7) | ||||
|
|
|
|
|
| ||||
|
|
|
|
|
| ||||
|
|
|
|
|
| ||||
|
|
|
|
|
| ||||
|
|
|
|
|
| ||||
|
|
|
|
|
| ||||
|
|
|
|
|
| ||||
|
|
|
|
|
| ||||
(8)
TOTAL |
|
|
|
| |||||
ANEXO
III C
Formulario
para la elaboración del presupuesto preliminar
(1) |
|
|
|
|
|
|
|
| |||||||||||||||||
|
|
|
|
FORMULARIO
PARA LA ELABORACION DEL PRESUPUESTO PRELIMINAR | |||||||||||||||||||||
|
|
|
|
|
|
|
|
|
| ||||||||||||||||
JURISDICCION: |
|
|
|
|
|
PRESUPUESTO
1997 |
| ||||||||||||||||||
ENTIDAD: |
|
|
|
|
|
FECHA /
/ |
| ||||||||||||||||||
|
|
|
|
|
|
|
|
|
| ||||||||||||||||
P R O Y E C T O |
A C T I V I D A D |
O B R A |
TAREA
/ TRABAJO |
DENOMINACION Y
DESCRIPCION |
P R I O R I D A D |
FUENTE de FINANC. |
INCISO |
IMPORTE |
| ||||||||||||||||
(2) |
(3) |
(4) |
(5) |
(6) |
(7) |
(8) |
(9) |
(10) |
| ||||||||||||||||
|
|
|
|
|
|
|
|
|
| ||||||||||||||||
|
|
|
|
|
|
|
|
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| ||||||||||||||||
|
|
|
|
|
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|
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| ||||||||||||||||
|
|
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|
| ||||||||||||||||
|
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|
| ||||||||||||||||
|
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| ||||||||||||||||
|
|
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|
|
|
|
|
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| ||||||||||||||||
|
|
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|
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|
|
| ||||||||||||||||
(11)
TOTAL |
|
|
|
|
|
|
| ||||||||||||||||||
INSTRUCCIONES
PARA EL REGISTRO DE LA INFORMACION DEL FORMULARIO PARA LA ELABORACION DEL
PRESUPUESTO PRELIMINAR (ANEXO 3a)
1
Anote los
datos referidos a la jurisdicción o entidad, así como la fecha de registro de la
información.
2 y
3 Anote los códigos
establecidos para los objetivos y programas o categorías
equivalentes.
4
Escriba la denominación y descripción sintítica de los objetivos y
programas o categorías equivalentes.
NOTA: En la denominación de los objetivos indique qué se pretende
realizar, al cabo de cuántos años se planea realizar el objetivo, cuán amplia
será la cobertura del mismo, a qué tipo de población estará dirigido el esfuerzo
y que impactos se esperan como consecuencia de plasmar el
objetivo.
5
Establezca las prioridades para cada uno de los conceptos señalados en el
punto 6, asignando tres prioridades, A (prioridad alta), M (prioridad media) y B
(prioridad baja)
NOTA: La fijación de las prioridades a nivel de programas corresponderá
al responsable de todos los programas o categorías o equivalentes, en tanto que
la fijación de prioridades a nivel de objetivos le corresponderá a la máxima
autoridad de la jurisdicción o entidad. No obstante ello, el conjunto de las
prioridades a todos los niveles se puede establecer en equipos de trabajo en los
cuales participen funcionarios de distinto rango
jerárquico.
6
Anote el importe de cada programa
7
Totalice la columna 6
INSTRUCCIONES
PARA EL REGISTRO DE LA INFORMACION DEL FORMULARIO PARA LA ELABORACION DEL
PRESUPUESTO PRELIMINAR (ANEXO 3b)
1
Anote los datos referidos a la jurisdicción o entidad, así como la fecha
de registro de la información.
2,3 y 4
Anote los códigos
establecidos para los programas o categorías equivalentes, proyectos y actividades específicas de los
programas.
5
Escriba la denominación y descripción sintética de los programas o
categorías equivalentes, proyectos y actividades.
6
Establezca las prioridades para cada uno de los conceptos señalados en el
punto 6, asignando tres prioridades, A (prioridad alta), M (prioridad media) y B
(prioridad baja)
NOTA: La fijación de las prioridades a nivel de proyectos y actividades
del programa corresponderá al responsable del programa
7
Anote el importe de cada proyecto y actividad
8
Totalice la columna 7
INSTRUCCIONES
PARA EL REGISTRO DE LA INFORMACION DEL FORMULARIO PARA LA ELABORACION DEL
PRESUPUESTO PRELIMINAR (ANEXO 3c)
1
Anote los datos referidos a la jurisdicción o entidad, así como la fecha
de registro de la información.
2,3,4 y
5 Anote los códigos establecidos
para los proyectos, actividades, obras y las tareas o
trabajos.
NOTA: Si la organización no puede en un determinada actividad abrir
tareas o trabajos a las que pueda asignar recursos, deberá agrupar conjuntos de
tareas o establecer cualquier otro sistema de desagregación de la
actividad.
6
Escriba la denominación y descripción sintética de los proyectos,
actividades, obras, tareas y trabajos.
7
Establezca las prioridades para cada uno de los conceptos señalados en el
punto 5, asignando tres prioridades, A (prioridad alta), M (prioridad media) y B
(prioridad baja)
NOTA: La fijación de las prioridades a nivel de actividades del proyecto,
obras y trabajos corresponderá al responsable del proyecto, en tanto que la
fijación de prioridades de las tareas de cada actividad es responsabilidad del
jefe de la actividad.
8
Anote los códigos del clasificador presupuestario por fuente de
financiamiento.
9
Anote los códigos del clasificador presupuestario del gasto por
objeto
10 Anote
el importe de la fuente de financiamiento e inciso de cada tarea y/o
trabajo
11
Totalice la columna 9
BIBLIOGRAFIA
Presupuesto
Base Cero- Método práctico para evaluar gastos
Peter A.
PYHRR
LIMUSA
Noriega Editores, 1995, decimaprimera impresión
Presupuesto
Base Cero
Nereo R.
PARRO
Ediciones
MACCHI, 1981
Presupuesto
Base Cero- Método, y bases de aplicación, con un estudio de la más avanzada
experiencia existente en el mundo
Isaac
SENDEROVICH
Ediciones
Contabilidad Moderna S.A.I.C., 1981
Presupuesto
Base Cero- Conceptos y experiencias
Carlos A.
FERRARI
Editorial
Sudamericana, 1984
Sistema
de análisis y desarrollo de la capacidad institucional
(SADCI)
Alain
TOBELEM
División
de Administración del Sector Público, Departamento Técnico, Región América
Latina y Caribe, Banco Mundial, 1993, Publicaciones Ocasionales de LATPS No
9.
Turn-Around,
La reingeniería de los negocios
Guillermo
R. SCHMITT
Editorial
Atlántida, 1994, tercera edición
The
Reengineering Revolution
Michael
HAMMER and Steven A. STANTON
Harper
Collins Publishers, N.Y, 1995
Reingeniería
Michael
HAMMER & James CHAMPY
Grupo
Editorial Norma, 1994